jueves, 1 de mayo de 2014

"La ola" y Durkeim, análisis y relación


"La Ola" y Durkheim

La Ola es una película de drama alemana que está basada en hechos reales, particularmente en un experimento llamado La Tercera Ola, llevado a cabo en una escuela de los Estados Unidos. El objetivo de éste experimento fue intentar demostrar que las sociedades actuales, no son inmunes a la atracción de ideologías autoritarias y dictatoriales. Detrás del experimento y de los sucesos que muestra la película se encuentra la idea de que en las sociedades modernas e industriales, a lo que yo le agregaría “de consumo”, se genera un proceso de individuación muy fuerte, capaz de crear fuerzas colectivas que lleven a movimientos fascistas y regímenes autoritarios.

A partir de los textos Las reglas del método sociológico, La división del trabajo social, El suicidio Las formas elementales de la vida religiosa, de Durkheim, intentaré realizar un análisis de la película. Para eso voy a tomar como «hecho social» a La ola: un grupo con características de sociedad de segmento único y por ende de solidaridad mecánica, que se forma dentro de una sociedad moderna donde existe una solidaridad orgánica.


Lo primero que nos permite representarnos a La ola como un hecho social es su poder de coerción que se manifiesta desde el primer momento. Aunque haya comenzado de una forma libre y en cierto sentido democrática, donde los individuos que luego la van a componer deciden integrar el grupo por voluntad propia, desde el momento en que La ola se encuentra básicamente desarrollada se puede observar cómo se impone sobre todos los individuos del grupo, y además se exterioriza. Este es el momento donde comienza a desarrollarse una conciencia colectiva que se transforma en independiente de los individuos, comienza a desarrollarse por fuera de las conciencias particulares, es una fuerza social que los trasciende y los arrastra, despojándolos de su voluntad individual, en una corriente colectiva que se hace cada vez más fuerte.


Hay dos momentos que a mi juicio son fundamentales para explicar éste hecho social: su consolidación como grupo y su desintegración abrupta. En ambos momentos el grupo se encuentra congregado físicamente. En un principio se congregan en el aula, y en el momento de su desintegración en el auditorio del colegio.
Todo comienza en el primer día de clase, la clase voluntaria de autocracia, a partir de una simple pregunta que realiza el profesor: “Juguemos a algo ¿quién podría ser el líder aquí?”. El juego, como lo llama el profesor, comienza de forma voluntaria y democrática, y una vez establecidas las reglas, las normas, y los símbolos del grupo, se consolida una conciencia colectiva que rápidamente se va haciendo cada vez más fuerte.

Absolutamente todas la acciones son ritualizadas en los momentos donde se encuentra presente el líder y se congrega físicamente todo el grupo. La consolidación y repetición de determinadas acciones por parte del grupo y la aceptación por parte de todos sus miembros las va ritualizando. Los ritos, son una forma en la que se crea y se fortalece la conciencia colectiva, la solidaridad mecánica y grupal. Por ejemplo, en el aula se saluda al profesor de una determinada manera, los alumnos deben levantarse cuando quieren tomar la palabra, se sientan y están distribuidos de manera determinada por el profesor en el aula, y deben responde de forma concisa las preguntas. El saludo, como acción ritualizada, se repite fuera del aula como forma de saludo entre miembros de la La ola. Ese saludo se transforma en un símbolo. También el uniforme (las camisas blancas) y el logo de La ola son símbolos, realidades materiales e ideales que posee el grupo en sí mismo. Su uso y repetición son exigidas por y entre los mismos miembros del grupo, y esto refuerza la conciencia colectiva. El derecho represivo se observa en la ira moral que producen las ofensas que un mismo miembro del grupo puede llegar a realizar frente a un símbolo del grupo o la negación de una de las acciones ritualizadas, como por ejemplo no respetar el uniforme. Esto es castigado con la exclusión, y en un momento crítico de la película, cuando acusan a uno de los miembros de traidor, parece que el castigo también puede llegar a ser violencia física. También se ve ira moral frente a ofensas que miembros ajenos al grupo realizan contra símbolos de La ola, y de otras agrupaciones, como los anarquistas, que reciben ofensas por parte de La ola. La ofensa a un símbolo es una ofensa a la conciencia colectiva, es considerado por sus miembros como un crimen, y para que la conciencia no se vea debilitada se deberá sancionar con una pena determinada.

En una sociedad industrial, de consumo, sus miembros se individualizan, las conciencias particulares se encuentran por encima de la conciencia colectiva. Y cuando existe una fuerte desintegración social, la conciencia colectiva es extremadamente débil o nula en algunos casos. En un momento de la película, en un boliche, uno de los chicos le dice a otro que “todos tienen su propio pacer en mente, lo que hace falta es una meta común que nos una”. Esta falta de integración genera en los individuos necesidades sociales insatisfechas y La ola nace a partir de una necesidad social, necesidad de un fin que trascienda las conciencias particulares. Uno de los alumnos y miembro de La ola también dice que para que pueda llegar a existir un régimen dictatorial debe existir insatisfacción en la sociedad. Esta insatisfacción es lo que genera una sociedad en un estado de anomia. El estado del medio social en el que surge el grupo es también su causa.

Este estado del medio social y la forma en que influye sobre los individuos se ve de manera exagerada sobre uno de los miembros. Yo diría que es el único de los miembros realmente capaz de cometer tanto suicidio altruista (durante su pertenencia al grupo) como suicidio egoísta (en el momento de la desintegración del grupo). Y en el momento de su desintegración termina por suicidarse. Es este hecho el que nos resalta tanto la fuerte conciencia colectiva que se gestó en cinco días dentro de La Ola, como la fuerte falta de integración de la sociedad donde vivían. La causa del surgimiento de una fuerte conciencia colectiva es la necesidad de pertenencia de los miembros de una sociedad que se encuentra desintegrada y altamente individualizada. La pertenencia a un grupo da a sus miembros la sensación de estar del lado correcto, la sensación de bien.

El experimento se descontrola, la fuerza de la conciencia colectiva lo domina.
En las sociedades modernas seguimos encontrando rituales de solidaridad. La Ola es un ejemplo claro. En los nacionalismos se encuentran rituales de solidaridad, solidaridad que puede ser denominada solidaridad nacional. En este tipo de solidaridad acciones como cantar el himno son ritualizadas.
Las sociedades actuales, según Durkheim, se encuentran en un estado de anomalía, en un estado de desregulación y en algunos casos una excesiva individuación.